Un libro que nace de la lucha contra el final de la historia y se piensa en y contra la finitud del arte y la política. No se conforma con declarar su oposición a semejantes clausuras del significado, sino que, fiel a cierta estela benjaminiana en América Latina, tensa al máximo la oposición entre arte y política, vanguardia y realismo, estética e ideología, tradición y ruptura, para sembrar todas estas categorías de nuevas potencialidades nacidas de sus contradicciones irresolubles. La paradoja fundamental de este libro vigoroso y original consiste en habitar la aporía y los antagonismos de las modernidades latinoamericanas como promesa de otro tiempo, y otro espacio todavía por-venir.
LUIS MARTÍN-CABRERA
Universidad de California, San Diego