Al presentar a uno de los personajes más famosos de la literatura, Jean Valjean, el noble campesino encarcelado por robar una barra de pan, Les Misérables se encuentra entre las mejores novelas de todos los tiempos. En él, Victor Hugo lleva a los lectores a las profundidades del inframundo parisino, los sumerge en una batalla entre el bien y el mal, y los lleva a las barricadas durante el levantamiento de 1832 con un realismo impresionante que no tiene rival en la prosa moderna. Dentro de su dramática historia hay temas que capturan el intelecto y las emociones: crimen y castigo, la implacable persecución de Valjean por parte del inspector Javert, la desesperación de la prostituta Fantine, la amoralidad del pícaro Thénardier y el deseo universal de escapar de las cárceles de nuestras propias mentes Les Misérables le dio a Victor Hugo un lienzo sobre el cual retrató sus críticas a los sistemas políticos y judiciales franceses, pero el retrato que resultó es más grande que la vida, de alcance épico, un espectáculo extravagante que deslumbra los sentidos incluso cuando toca el corazón.