572 Si ven crecido a su hijito, como de piedá no entienden y a suplicas nunca atienden, cuando no es éste es el otro, se lo quitan y lo venden o lo cambian por un potro.
573 En la crianza de los suyos son bárbaros por demás. No lo habia visto jamás: en una tabla los atan, los crian así, y les achatan la cabeza por detrás.