El autor de Diálogo en el Infierno, Maurice Joly, (Los elementos de este prefacio fueron tomados del extraordinario libro de Henri Rollin, El Apocalipsis de nuestro Tiempo. Valdría la pena reeditar esta obra, destruida por los alemanes en 1940), abogado ante los Tribunales de París, vivió una existencia difícil y oscura. Típico rebelde (se fugó de cinco colegios en su juventud), puso sus dotes brillantes al servicio de la libertad y de sus antipatías. Opositor bajo todos los regímenes, tuvo un sinnúmero de enemigos y algunos admiradores. Revelan sus escritos que conocía tan bien el arte de encumbrarse (consagró a tema un curioso líbelo) como el de gobernar (los Diálogos lo atestiguan). Sin Embargo, empleó su saber con el solo objeto de atacar a quienes aplicaban para su beneficio personal las técnicas del éxito. Su palabra mordaz eligió sucesivamente como blanco a Napoleón III, Víctor Hugo, Gambetta, Jules Grévy, en quienes apenas hizo mella. Pobre, enfermo y acabado, el 17 de julio de 1887 se descerrajó una bala de revolver en la cabeza. Abierto sobre su escritorio hallaron un ejemplar de los Hambrientos, libro que publicara dos años antes. Comienzan hablando de sus doctrinas, Maquiavelo autor de El príncipe, explica a Montesquieu, que la fuerza y la astucia, es un mal necesario para gobernar a los hombres y explica como haría para convertir, una democracia liberal en un régimen autoritario, sancionando su propia constitución. Mientras Montesquieu, autor del Espíritu de las leyes, fiel a su doctrina, las leyes y la división de poderes y la participación del pueblo, cree que esto no sucederá. Maquiavelo, explica el método, dice que no piensa violentar a los hombres, sino de desarmarlos, no va a combatir sus pasiones políticas, sino que va a borrarlas, tampoco va proscribir sus ideas sino trastocarlas. Dice que el secreto es debilitar el espíritu público hasta el punto de desinteresarlo de toda idea o principio. Montesquieu horrorizado escucha. Maquivelo, dice que para dirigir la sociedad, es necesario aturdirla, sumirla en la incertidumbre en contradicciones. Destruirá los partidos políticos y la iniciativa popular etc. Montesquieu advierte a Maquiavelo que será difícil lo que piensas hacer porque los medios de comunicación darían cuenta de las intenciones. Maquiavelo, con respecto a los medios de comunicación, dice que su gobierno se hará periodista, y que si hay 10 por la oposición el gobierno tendrá 20, por su puesto el pueblo no debe sospechar nada y aquellos que pretendan hablar un lenguaje independiente hablaran el mió. Maquiavelo, Haré decir cosas en contra del pueblo y las desmentirá. No pienso escapar a las críticas, siempre que las escuche, sus palabras defenderán la democracia y la libertad de las personas y las doctrinas del derecho. Montesquieu, no puede creer, es un atentado a la razón a la verdad y la justicia, para el todo debe estar dentro de la ley nada fuera de ella.