En la secuencia de imágenes que han quedado de aquella noche, justo después del gol, se ve a Cristiano Ronaldo que niega con la cabeza, cabreado, y es en este punto donde los récords y las estadísticas empiezan a interesarme un poco. Porque desde hace años los defensores de CR7 se refugian en las cifras para compararlo con Messi, sin tener en cuenta que el fútbol es mucho más que eso, algo que incluso va más allá de la rivalidad entre dos marcas, Nike y Adidas.