Kittim Silva

Israel, en el Antiguo Testamento, era considerada como la esposa de Dios, pero espiritualmente cometió adulterio contra Él

El verdadero profeta de Dios no es miope a las realidades sociopolíticas que cercan a un pueblo. Dios encargó rigurosamente a Moisés para que le dijera a Faraán: «Deja ir a mi pueblo para que me sirva» (Éxodo 8:2). En la tribulación, Moisés volverá a repetir lo mismo al anticristo

Nota: El Señor Jesucristo tuvo un ministerio de tres años y medio, tiempo durante el cual sus enemigos no pudieron quitarle la vida, aunque sí lo intentaron