Una belleza ❤️
siempre hay algo de luz en las telarañas afectivas que se tejen entre esos seres que reconocemos como familia a pesar del veneno latente y las supuestas maldiciones heredadas. arde reconocerse a una misma entre las palabras narradas de un corazón que está a punto de romperse pero no terminamos de aceptarlo, aún cuando ya sólo quedan pedazos.
Me sorprendió leer esta novela, no tenía ninguna expectativa. Llegué por curiosidad. No había oído siquiera nombrarla. ¡Vaya sorpresa. Me conmovió la forma de narrar, siempre me han gustado los textos con tintes autobiográficos, historias de familia, misterios que se esconden o desvelan al correr de las páginas. Crecer con la narradora, sufrir sin saber que se está sufriendo la pérdida física o emocional de alguien. Tener amores que están y no están, que huyen pero regresan para hacernos explotar de felicidad, de placer, pero también de llanto. Vivir la vida de alguien más que, al mismo tiempo, es la nuestra. Me encantó.
Maravilloso, es un veneno en dosis de cura.
"Los padres te dan la vida, pero también te dañan. Sin querer. La ermandad es lo que te salva."
Me encanto como la autora relaciona la familia, los venenos, la muerte, el suicidio, la hermandad en esta novela. La manera en que entrelaza estos temas y todo es un loop que inicia con una muerte, y termina con vida.
Me conmovió, encontré pedacitos de mi y la recomiendo si les gustan esas novelas que entrelazan todo y son un loop que regresa al punto de partida.