«Ten cuidado —solía decirle Maurice—. Observa las reacciones de tu cuerpo. Es la sabiduría de tu ser, que te está hablando. Presta atención a la preocupación, la ansiedad y a todas las sensaciones que vienen de tu interior. Se manifiestan en el cuerpo. ¿Qué es lo que te aconsejan?».