No hay nada tan expresivo como la cara de un niño pequeño: la boca abierta en una mueca desesperada, los ojos apretados, la piel enrojecida por el esfuerzo... y qué gritos.
Josué Osbournehas quotedlast year
Recuerdo que ella dijo –o gritó, porque con la capota quitada había que levantar la voz para entenderse– que en el campo no puedes preferir unos olores a otros. Tenía razón: aspirar embelesado el olor de la hierba y torcer la nariz ante