ablo ya ha rechazado este rumor en el versículo 12; ahora dice: «esto es imposible, ya que yo comencé a predicar el Evangelio en respuesta al llamamiento del Señor en el camino de Damasco, antes de encontrarme con los líderes de la iglesia de Jerusalén; y cuando me encontré con ellos, fue por un período demasiado corto de tiempo como para recibir instrucción. Pasaron muchos años hasta que tuve la oportunidad de presentar mi evangelio libre de la ley ante ellos y, cuando lo hice, reconocieron que era el Evangelio válido para los gentiles, hacia los cuales fui enviado a predicar manifiestamente».