Essência

desde el principio, fue como jugar a la ruleta rusa con todas las balas cargadas; estaba destinado a que alguna me atravesase el corazón

Porque ella está prohibida, pero le despierta la piel.

Así que, el primer día que Leah llegó a casa decidí seguir mi rutina. Pasé la tarde trabajando en uno de los últimos encargos, concentrado en construir una imagen a base de líneas, en redondear, perfilar y detallar hasta lograr el resultado perfecto.

Porque a veces basta un «deja que ocurra» para tenerlo todo.

Toda revolución comienza y termina con sus labios.

La ausencia de ruido o caos. Solo eso, calma. De la que anuncia que la tormenta está cerca, o es una señal de que estás en el ojo del huracán.

Yo había pensado mucho últimamente en la muerte.
No en lo que pasa cuando ocurre, no en ese adiós que todos terminaremos diciendo algún día, sino en cómo afrontarla cuando se lleva a las personas que más quieres.

—El daño es un efecto colateral de vivir.

la vida hay que sentirla. Siempre

con el paso del tiempo, cuando pienses en ello solo podrás pedirte perdón a ti misma por no haberte atrevido a ser valiente.