Víctor Sabaté

Cuando un profesor o un alumno usa el humor para herir o dañar, es responsabilidad de todas las personas en el aula encontrar maneras de reconocer lo que ha pasado y de trabajar para reparar el daño que eso ha causado a la dinámica de la clase.

A largo plazo, enseñar a los estudiantes a valorar la discrepancia y los intercambios críticos de opinión los prepara para enfrentarse con el mundo real

El motor del pensamiento crítico es el anhelo de saber, de comprender cómo funciona la vida.