En aquellas circunstancias me llamó la atención un libro colocado muy cerca de mí, Las mil y una noches, en la edición de Beirut, también llamada católica. ¿Qué hacía en una casa en la que nadie se interesaba por la literatura? ¿Quién lo había colocado al lado de mi diván, al alcance de mi mano? Probablemente, una de las visitantes lo ha