—Entonces está bien. Mamá, cuando yo sangre, ¿a mí también me darán regalos?
—No, hija mía. Porque esto no se lo diremos a nadie. Será un secreto, se terminará sin que nadie se dé cuenta.
—¿Por qué a ellos cuando se hacen mayores les hacen una fiesta, reciben regalos, y nosotras al crecer nadie lo sabe, no nos traen regalos?