Los algoritmos sobre delincuencia tienen más limitaciones de lo que la gente podría pensar. En 2013, investigadores de la Corporación RAND enumeraron cuatro mitos comunes sobre la policía predictiva.[329] El primero es que un ordenador sabe exactamente lo que ocurrirá en el futuro. «Estos algoritmos predicen el riesgo de eventos futuros, no los eventos mismos», señalaron. El segundo mito es que un ordenador lo hará todo, desde reunir los datos relevantes sobre delincuencia hasta realizar las recomendaciones apropiadas. En realidad, los ordenadores funcionan mejor cuando ayudan al análisis humano y a las decisiones sobre política policial, en lugar de sustituirlas. El tercer mito era que las fuerzas policiales necesitaban un modelo muy potente para hacer buenas predicciones, mientras que a menudo el problema es obtener los datos correctos. Tal como dijo Lum, «en ocasiones tienes una base de datos donde la información que necesitas para hacer la predicción simplemente no está».
El mito final, y quizá el más persistente de todos, era que unas predicciones correctas llevan automáticamente a una reducción de la delincuencia. «Las predicciones por sí solas son solo eso: predicciones —escribió el equipo de investigadores de la RAND—. La disminución real de la delincuencia requiere actuar basándose en esas predicciones». Para controlar la delincuencia, las agencias necesitan, por tanto, centrarse en las intervenciones y la prevención más que simplemente en hacer predicciones.