ino por el modo en que parecía resistirse a ciertas actividades –los deportes, mirar los partidos de fútbol por la televisión o trabajar en el jardín con su padre– para permanecer en la cocina con Louise, hablando mientras ella cocinaba, o sentado en su habitación recortando fotografías de paisajes de las revistas y pegándolas en un cuaderno que ya había llenado de una psicodelia de