Mamen Horno Chéliz

En general, la migración de larga duración puede provocar un conflicto de identidad basado, no solo en sus propios sentimientos (pues no pueden decidirse entre las dos culturas, sin sentir que están siendo infieles a la otra), sino también en el feedback que reciben de los demás.

palabras que expresan movimiento (la mayoría de los verbos, pero también nombres como carrera, salto, etc.) se procesan con las redes neuronales del córtex motor, es decir, las mismas neuronas que se ponen en funcionamiento cuando efectivamente nos estamos moviendo.

De algún modo, pensar en las palabras, leerlas, pronunciarlas, conlleva una experiencia física de lo que estas significan.

para poder entender nuestras emociones, pero también para visibilizar a los grupos sociales que en alguno de los parámetros se separan de lo que consideramos normal o normativo.

no se puede ser feminista si no visibilizas la presencia de las mujeres en el mundo y en especial en el mundo laboral que hace tan poco tiempo que hemos conquistado

Porque al cruzar esa puerta, todo un mundo cognitivo se abrió para Ildefonso. Imagina lo que tiene que ser, después de más de veinte años sobreviviendo en un entorno confuso, que todo comience a tener sentido.

la privación de input lingüístico tiene consecuencias neuroanatómicas, de tal modo que el cerebro de una persona que se ha desarrollado sin acceso a una lengua materna no es el mismo que el de los demás.

, cuantas más palabras tenemos, más ajustado es nuestro pensamiento, de tal modo que contar con un cerebro lingüístico nos permite pensar mejor, de modo más profundo.

Esa voz interior con la que conversamos más o menos continuamente moldea nuestras emociones y es una herramienta básica de control de nuestra salud mental

No he encontrado un lugar mejor para comenzar este libro sobre la naturaleza de las palabras que la cocina de María Moliner, la lexicógrafa más famosa de la lengua española. Sentada a la mesa y rodeada de fichas, su empeño fue conseguir una obra que recogiera el espíritu de las palabras en uso. María tenía la intuición de que las palabras estaban vivas y su objetivo era atrapar su latido. Y, de algún modo, podemos asegurar que lo consiguió.