Rasmus Hougaard

el liderazgo cobra más que nunca un valor trascendental: cómo llevar al equipo a centrarse en lo que realmente es más importante, en vez de perderse en lo urgente.

se muestra abierto a los diferentes puntos de vista.

a compasión no es algo blando o sentimental. Es concreto y práctico.

mo seres humanos, nos regimos por las necesidades básicas de dar sentido a la vida, ser felices, relacionarnos con los demás y aportar algo positivo a la sociedad.

Muchas veces los líderes que manipulan y operan en este espacio pueden lograr resultados a corto plazo, pero a largo plazo, la gente no les seguirá.

Thomas Davenport, autor de The Attention Economy, escribió: «Entender y mantener la atención es ahora el factor más importante del éxito empresarial»4. La «economía de la atención» es un término apto para nuestros actuales entornos empresariales.

ecuación sencilla para la productividad en la economía de la atención sería atención × tiempo × competencia = productividad. Sin atención, debes dedicar más tiempo a cada tarea y tu productividad disminuye.

La atención tiene seis facultades distintas: control, capacidad, velocidad, agilidad, claridad y estabilidad.

El liderazgo generoso exige moderación, exige refrenar la tentación de dirigir constantemente

flexibilidad, autoconocimiento, resiliencia, generosidad, agilidad cognitiva y emocional, foco y capacidad de priorizar, compasión, empatía, presencia, reflexión, humildad, aceptación de la vulnerabilidad…, y una fuerte automotivación enraizada en un contagioso sentido de propósito.