dedicación al mundo interno. No es así para Freud; justamente el objeto del psicoanálisis freudiano es restituir la dialéctica mundo interno-mundo externo, en un análisis que necesariamente trata de develar la perspectiva reprimida que el paciente tiene de la realidad, que implique también para el analista un enriquecimiento de su propia perspectiva gracias a la del paciente, perspectiva reprimida y reducida al nivel imaginario por la cultura convencional.