Eleonora Aldea

Ahora sé que ser feminista se trata de tener el poder de elegir, entre varias opciones, la vida que uno quiere construir. Y poder cambiar de opinión y elegir otra. Y otra. Y que el juicio del resto no te afecte. Ni siquiera el de tus hijos. El feminismo tiene que ver con la libertad.

Pienso que alguna vez, aunque ya no lo pueda recordar, fui como mis hijos. Pienso que algún día, que aún no puedo imaginar, ellos van a ser como yo soy ahora. Y quizás no se van a acordar de bailar conmigo en el living. Quiero que se acuerden de bailar conmigo en el living. Y lloro.

Para mis papás y para mis hijos.
Por hacerme y deshacerme.

Aprendo que uno florece o puede florecer, más de una vez, en distintos lugares y circunstancias.

Conozco las tácticas de esta guerra contra mí misma, que es en verdad una guerra contra todas nosotras.

Creo fielmente que la manera en la que alguien se relaciona con el mar es la manera en la que vive. Con arrojo, o no. Con curiosidad, o no.

las cosas más cotidianas porque la verdad nos habla a través de ellas.

Estuve ahí mientras mi ciudad cambiaba. Estuve ahí, cambiando con ella.

Mi enemiga se pone frente a mí, cuando me veo al espejo. Me dice que no es suficiente, que nunca es suficiente. Me compara, no sólo con otras mujeres, sino conmigo misma

Lo que no sé es cómo aceptarme. Cómo quererme. Nadie me enseñó, nadie lo consideró impo