es verdad!, hubo también un tifón que se anticipó al otoño y las plantas de arroz quedaron convertidas en un amasijo de rastrojos que mostraba el paso del viento y auguraba una mala cosecha. De todas formas, tanto el día quince de agosto[52] como el veinticinco de septiembre, el cielo mostraba lo que podríamos llamar un cielo azul americano y, como decían que aquel día llegaba, al fin, el ejército americano, se suspendieron las clases; en realidad, hacía tiempo que dedicábamos las horas lectivas a limpiar escombros. No sé de dónde sacaría la idea