Yang claro es el cielo y el Yin turbio la tierra; cuando el Qi de la tierra asciende crea las nubes y cuando el Qi del cielo desciende produce la lluvia”. Cualquier cosa del universo contiene dos aspectos contrarios, Yin y Yang, por ejemplo, día y noche, calor y frío, movimiento y reposo, etc. “El movimiento y los cambios de Yin y Yang promueven el desarrollo y cambio de las cosas”. Por ello el Suwen, en el mismo capítulo, afirma: “Yin y Yang son el principio del universo y la ley que rige todos los seres. Son padres de los cambios, raíz y fuente de vida y muerte, es decir, morada de la Providencia”[