El relámpago

duerman abrazadas, sus sueños son distintos. Precisamente porque las personas influyen en los demás y cuidan de los demás, debemos respetar su forma de vida, ¿o no? Esta de aquí ha estado a mi lado en mi momento más duro. Pero no me dedicó ni una palabra amable. Si hubierais sido vosotras, seguro que me habríais dicho algo para tranquilizarme. Pero no lo habríais hecho por mí, sino para tranquilizaros vosotras mismas. Insistiríais en que somos amigas y que no pode

». También dijo que los cuadros de Boucher no tenían más que «elegancia, empalago, galantería fantasiosa, coquetería, simpleza, cambio, brillo, pieles de aspecto maquillado y obscenidad

Respetar las emociones dulces, la elegancia y la fantasía por encima de la verdad y la moral; sumergirse en el amor del momento en lugar de intentar darle un significado a la vida ante un futuro que desconocemos; dejar de lado la lógica y las costumbres para conceder valor al disfrute de lo que experimentamos en el momento. Eso es el alma del rococó