Mona Eltahawy

la misoginia refleja la jerarquía: las sudanesas que son arrestadas por «vestir de manera indecente» que pertenecen a familias adineradas o con contactos suelen librarse de los latigazos o pagan una multa para evitar el dolor y la humillación. Las mujeres menos favorecidas y las cristianas del sur —lo que pasó a ser Sudán del Sur— son las más afectadas por el infame artículo 152.

Cuando hablo sobre la necesidad de una revolución social para que nuestra revolución política tenga éxito, tengo en mente esta victoria islamista sobre las costumbres sociales —además de la definición de modestia—, no solo la opresión del régimen.

Así es como se hacen con tu cuerpo, tan subrepticiamente que acabas por dudar si el abuso ha existido, si de verdad te has sentido asqueada, si, en realidad, unos dedos se deslizaron por debajo de tu asiento en el autobús o si te rozaron el culo cuando el hombre al que pertenecían apartó la vista.