Estoy cansada de ser un tema de debate, en el que puedas posicionarte a favor o en contra. Solo espero compañía, no quiero que me aleccionen con la teoría king kong, ni con el manual del perfecto poliamoroso. Ni que me miren desde su superioridad moral, como si no se hubieran revolcado alguna vez en el barro por amor, aunque sea monógamo. ¡Estoy sufriendo!