Óscar Hahn replantea el tema del amor a través de un fantasma que se transfigura en los objetos domésticos para volver a su amada. Adquiere la forma de una toalla, una sábana, una funda de almohada o una camisa sucia. El abandono y la memoria cobran vida en Mal de amor, donde los resabios de un extraño erotismo surgen como una sombra que deambula por los rincones con la esperanza de recuperar lo perdido.