Y no hablo solo de formas muy diferentes, sino incluso rotundamente incompatibles. La poesía es hoy un modo alternativo de conocimiento, que en el origen debió de ser el que despertó todos los demás, pues la mirada poética y curiosa sobre la realidad fue la que dio lugar a la filosofía, y a la ciencia, y a la religión, y a las artes… y sigue siendo, en fin, la manifestación más habitual de la necesidad instintiva de explicar lo que vemos o lo que somos.