Me gusta mucho cómo escribe Etchebarne. Esa cercanía, esa observación profunda y justa sobre la vida, incluso en sus momentos grises y absurdos. Además, es muy contemporáneo y cero rimbombabte en el lenguaje. Es un poco cínica, pero supongo que éso es, en parte, lo que lo hace tan actual.
Creo que es un libro que está bueno leer para ver por dónde va la literatura argentina hoy, muy cerca de lxs autorxs, sin ser una memoir o una crónica ni poesía. Es un libro que funciona, también, como guía para lectorxs/escritorxs. Y tiene una virtud que pocas otras ediciones tienen hoy y es que no tiene una sola errata.