Pero bueno, amigos, el amor es una mera forma de expresión. Si me lo preguntan, el amor es corto y fugaz, pero poderoso. Es como sellar un trato con un pacto de sangre, pero no es para siempre, ja, ja, no se engañen. El amor se acaba, como las palabras, como la vida o como el agua en este planeta. Hay un secreto que me sé muy bien, porque mis canas lo delatan, escuchen: el tiempo no se puede recuperar. Él es el dueño de todo, el amante del amor, y es a quien hay que rendirle tributo, aprovecharlo. Y qué mejor forma de adorarlo que amando con pasión. No dejen que la vida se les escape, no esperen a amanecer un día con el pelo gris y la cadera acartonada, llenos de arrepentimientos por lo que les faltó vivir, por lo que les faltó amar.