La cara en el abismo, de A. Merritt, y Ella, de H. Rider Haggard, tienen incluso menos en común con Wells que Verne. Ambas novelas presentan a un viajero que se encuentra en un lugar olvidado hace largo tiempo por el hombre moderno. En Ella, una magnífica mujer ha encontrado el medio para vivir para siempre a cambio de la sangre de sus seguidores; en La cara en el abismo, hombres lagarto descendientes de los dinosaurios mantienen a una raza de humanos esclavizada para sus obscenos juegos y placeres.