Mis mujeres, las mías, vociferaban todas, tenían el cuerpo descuidado, demasiado pesado o demasiado plano, dedos rasposos, caras sin pintar o, al contrario, maquilladas como puertas,
Sandra Arcos Reyeshas quoted2 years ago
Qué la empuja fuera, a asomar la nariz, a ver exposiciones, barrios medievales, por qué no juega a las asistentas sociales benévolas, visitadora de dislocados y marginados, acaso no debe quedarse una mujer tranquila junto a su marido y sus hijos?,