Los precios por arriba del nivel de equilibro generará presión compradora, aumentando así la cotización. El mercado por debajo del precio de equilibro implica depreciación y presión vendedora. Cuando termina la jornada de mercado y cierran las bolsas el precio de equilibrio del día se habrá mantenido. Al día siguiente todo vuelve a comenzar, al activarse las bolsas del mundo la oferta y la demanda comienzan desde cero. El precio de equilibrio es diario. Por lo tanto, nuestra lectura del mercado y por tanto nuestra estrategia cambia día a día.