Ha sido pionera en los temas concernientes a la igualdad de género, desde el uso de bombachos hasta plantones por el sufragio femenino, y en todo ese tiempo la ha pasado maravillosamente bien. Todavía lo hace, dado que ahora, como ya se ha vuelto costumbre, prácticamente todo es posible gracias a los pequeños cambios generados por gente como la señorita S.