Escribí Cóndores no entierran todos los días en la ciudad universitaria de Torobajo, en Pasto, una ciudad al sur de Colombia, en la frontera con Ecuador, a donde había llegado contratado como profesor de Humanidades.
Daniel Loaiza Fiscalhas quoted3 months ago
No teniendo dónde investigar, porque la única biblioteca que existía de verdad en esa ciudad era la del maestro Ignacio Rodríguez Guerrero,
Daniel Loaiza Fiscalhas quoted3 months ago
tas que diariamente me cruzaba con Pilar Narvión, la periodista española
Daniel Loaiza Fiscalhas quoted3 months ago
primer cuento, “El gringo del cascajero”.
Daniel Loaiza Fiscalhas quoted3 months ago
la hija del maestro Ignacio Rodríguez Guerrero
Daniel Loaiza Fiscalhas quoted3 months ago
Cóndores y se celebran los cincuenta años de la primera edición de esta obra
Daniel Loaiza Fiscalhas quoted3 months ago
cinco balazos que acabaron con la vida de don Rosendo Zapata
Daniel Loaiza Fiscalhas quoted3 months ago
doce años venía vendiéndoles con recargo cereales, abarrotes y paños
Daniel Loaiza Fiscalhas quoted3 months ago
León María Lozano, vendedor de quesos
Elin Fiscalhas quoted3 months ago
Escribí Cóndores no entierran todos los días en la ciudad universitaria de Torobajo, en Pasto, una ciudad al sur de Colombia, en la frontera con Ecuador, a donde había llegado contratado como profesor de Humanidades. Era 1970.