Educar a un hijo no es tarea fácil, y menos ante la confusión que generan los mitos que rodean a la crianza. Al considerar la teoría del apego y los más recientes descubrimientos de las neurociencias, es posible entender cada una de las fases del desarrollo emocional del niño, comprender sus conductas y la manera en que van construyendo las conexiones neuronales que les permitirán responsabilizarse cada vez más de su comportamiento. Lejos de disciplinar a través de los castigos y de situarse en una posición de autoridad, Teresa García Hubard sostiene que los padres deben aprender a construir una relación empática con sus hijos, una relación centrada en la conexión emocional, sustentada en el diálogo y la confianza.