¿Todos los hombres son iguales? ¿Qué pasa por su mente cuando se enamoran? ¿Cuál es su versión del cuento de hadas? A lo largo del proceso de liberación femenina, la mujer se ha hecho fuerte y el hombre se ha debilitado. La princesa, y yo sapo refleja las nuevas condiciones en las que se desarrollan elementos como la ternura y las relaciones amorosas, al mismo tiempo que revela la vulnerabilidad y las debilidades masculinas. En el nuevo panorama de nuestro tiempo, la autora, con una mirada aguda y divertida a la vez, se plantea con afán autocrítico algunas preguntas fundamentales: ¿Qué tan princesas somos? ¿Qué tan sapos son ellos? ¿Nacen sapos o los hacemos sapos? Dueña de un estilo y una imaginación que seducirá y conmoverá a los lectores, la autora deja hablar a los hombres, quienes nos cuentan las historias de sapos que no quieren ser príncipes ni desean reproducir los antiguos modelos masculinos. Hombres que dejaron de ser machos y aprendieron a expresar sus emociones, a mostrarse sensibles, creativos y cariñosos, pero que ahora tienen miedo, se sienten amenazados y no tienen claro qué papel les corresponde al lado de las mujeres modernas. El lector disfrutará de la inteligencia y la amenidad de estas historias que muestran un posible camino a la reconciliación de los sexos, en el que cada uno reconozca al otro y puedan así compartir el amor y el conocimiento en un mundo con mayor armonía.