Se trata de un asesinato cometido en Londres a finales del siglo XVIII y principios del XIX. Por aquel entonces Sherlock Holmes ayudaba a la policía en los crímenes.
Todo empieza en la amistad de Sherlock Holmes con el doctor Watson. Se conocen de compañeros de habitación. Serlock se dedicaba a ayudar a los detectives de Londres. Uno de los casos que se le asignó fue un asesinato en la carretera de Brixton. Un hombre había aparecido muerto en una casa abandonada, había varias pruebas, pero también falsas pistas
Sherlock Holmes y el Dr. Watson se encargaron del caso, se basaron sobre la pista de hombre alemán porque había una palabra escrita en alemán con sangre en la pared. Por fin Sherlock encuentra la mejor pista de todas: una caja de pastillas en la casa donde habían encontrado el cadáver. Se trataba de veneno. Luego se fijaron en las marcas del suelo, eran marcas de un *coche.
Sherlock y Watson junto con la policía tienden una trampa al cochero y consiguen atraparlo. Más tarde él lo confiesa todo.
