Este segundo volumen de Los diarios de Emilio Renzi, álter ego de Ricardo Piglia, recorre el periodo que va de 1968 a 1975. Aquí el joven escritor para de sus añor de formación a una carrera más sólida en el mundo de las letras argentinas con la dirección de una revista, los trabajos editoriales, los artículos, los cursos y conferencias. La pasión, la obsesión por la literatura se materializa en ideas y esbozos para cuentos y novelas, lecturas, encuentros con escritores consagrados, como Borges, Puig, Roa Bastos, Piñera. Aquí Renzilelva a cabo una serie de reflexiones sobre la escritura y sobre la obra de autores clásicos y novelistas policiacos. En su vida personal aparecen los viajes, la vida íntima y amorosa, y la Argentina de unos años convulsos: el fallecimiento de Perón y posteriormente el golpe militar. Renzi confiesa al inicio del libro: "Escribo un diario, y los diarios sólo obedecen a la progresión de los días, los meses y los años. No hay otra cosa que pueda definir un diario, no es el material autobiográfico, no es la confesión íntima, ni siquiera es el registro de la vida de una persona.