Entonces, ¿crees que quieres ser autónomo?
Adivinemos, ¿quieres libertad, flexibilidad y tener el control de tu vida?
No se puede negar que iniciar un negocio como autónomo cambiará tu vida; pero también cambiará tu relación con el trabajo y tu percepción del mismo.
Ser autónomo es una de las trayectorias profesionales más liberadoras.
También es una de las más difíciles. Empezar un negocio como autónomo no es tan sencillo como levantarse por la mañana, salir de la cama y abrir el portátil. Ser autónomo no es sólo una forma fácil de rentabilizar tus aficiones y tampoco es más fácil que un trabajo "de verdad".
Sin embargo, el trabajo autónomo es uno de los más gratificantes que se pueden hacer.
Una de las cosas más importantes que hay que recordar al convertirse en autónomo es que lo peor que te pueden decir es "no". Tienes que ponerte a prueba.
No hay que avergonzarse de ser rechazado, pero sí de no intentarlo en primer lugar. Es posible que tengas que llegar a la gente: las cosas no siempre vienen a ti; tendrás que buscarlas.
El trabajo autónomo puede hacerse a tiempo parcial, de forma paralela, o, con el tiempo, puede convertirse en un trabajo a tiempo completo.