La segunda novela que compone La trilogía de Nueva York.
El señor Blanco contrata a Azul (quien había trabajado con Castaño) para que siga a Negro a todas horas. Como buen detective, Azul cumple con discreción con su cometido. Pero el cometido dura años.
Y las dudas acaban acechándolo: ¿Quién es Blanco y por qué quiere que siga a Negro? ¿A qué se dedica Negro? ¿Quién persigue a quién?