"(…) Gardel solo quiere elevarse, que lo dejen en paz
para elevarse. Hace mucho tiempo que está atrapado
en la zona inferior, reclamado continuamente por los
que escuchan sus discos y gente como usted, que
estudian su vida. Todo eso lo tira hacia abajo,
¿comprende?, no lo deja ascender.
Cada vez que alguien pone un disco de Gardel, allá
está el alma de Gardel, que ya no es Gardel, sino el
alma, el alma de Gardel, que solo busca subir,
trascenderse en un Plano Superior, y lo tiran para
abajo, lo reclaman, porque él puso mucha fuerza en los
discos, ¿sabe?, no siempre que se escucha el disco de
alguien que murió, ese alguien se siente atraído por el
disco; no; sólo unos pocos, los que ponen el alma. (…).
Usted escucha a Gardel, que me perdone el pobrecito
por perturbarlo, nombrándolo así, con admiración, estas
cosas lo llaman hacia el Plano Inferior, pero Gardel
ponía el alma, y el alma de Gardel está en el surco de
cada disco, un poco del alma quiero decir, son pedazos
que fue dejando por la Tierra, y ahora tendría que
reunirlos silenciosamente para poder trascenderse,
¿me comprende?"