El arte de la guerra ha provocado numerosos estudios y reinterpretaciones por parte de filósofos, historiadores, estrategas militares o artistas. Thoreau dice que la naturaleza no habla a través del poeta, sino junto a él. De la misma forma, las enseñanzas de Sun Tzu se despliegan de la mano de las esculturas realizadas por Ortega para la presente edición, que así amplía su estudio sobre esta obra, después de haber realizado una serie de películas basadas en el libro. El diálogo redobla el misticismo y la diáfana lectura que el texto original hace del poder y sus derroteros, al tiempo que reivindica tanto la vigencia de la obra de Sun Tzu como la virtud atemporal de la obra de Ortega.