Catalina es una jovencita que de la noche a la mañana ve cómo se transforma su corta vida debido al secuestro de su padre. Como muchas familias, sufre la ausencia forzosa de un ser querido.
Patricia, la madre de Catalina y la familia van de paseo a la finca, cuando de repente aparecen en la carretera unos encapuchados y de manera amenazante y sin contemplación alguna se llevan al jefe del hogar, quien hace todo lo posible por evitarlo, mediante el diálogo y siempre tratando de proteger a su familia. La familia queda desconcertada, con inmenso dolor... emprenden la tarea, paso a paso, de vivir la zozobra, la tristeza y finalmente aprender a llevar el problema con valor y calma para tratar de hacer regresar el padre a casa.