Durante una fiesta, Lucina - el personaje principal- ve una mancha de sangre dentro de sus ojos. Es decir, queda prácticamente ciega. A partir de este episodio, comienza una historia donde, al margen de la recuperación de la vista que Lucinda intentará cueste lo que cueste, Lina Meruane lo entrelaza con la crisis personal de la protagonista, el amor–odio con su madre, una relación enfermiza y dependiente con su pareja, el vínculo con su médico, la enfermedad y esta nueva condición, la cual constituirá un verdadero quiebre en su vida. Una novela conmovedora y profunda. Por momentos sarcástica e incluso angustiante.
Año: 2012
Eterna Cadencia